El bótox, un aliado para este verano
Con la llegada de la época estival, cuando los rayos solares inciden con su mayor intensidad, contraemos más los músculos faciales para protegernos de esta radiación. Casualmente, los músculos que contraemos son aquéllos que generan las arrugas, que se tratan y previenen mediante la aplicación de la toxina botulínica o bótox. Las arrugas que se acentúan con la contracción de estos músculos son: el entrecejo, las arrugas de la frente y las patas de gallo. Coinciden con las arrugas que se generan cuando intentamos protegernos del sol.